Café & Tapas refresca su imagen con su nuevo local en la madrileña calle Montera.

Café & Té estrena un nuevo establecimiento en el número 10 de la madrileña calle Montera. Un Café & Tapas que se desmarca de su anterior estética y que combina diseño actual con un estilo retro-vintage.

El proyecto de interiorismo de este nuevo local Café & Tapas de la cadena de franquicias Café & Té se debe a Cuca García y parte de la creación de una terraza-invernadero cubierta y abierta a la calle peatonal junto a la puerta del Sol (zona de máxima afluencia) que invite a hacer una parada en el ritmo frenético de la ciudad.

 

 

La idea fue crear un pequeño oasis urbano en pleno centro de Madrid. El diseño del mobiliario necesario para su uso como restaurante y cafetería (barra, botelleros, bancos) es limpio, moderno y de líneas puras. El uso de la madera de Iroko en la fabricación, la iluminación en led cálido marcando toda la perfilería, las luminarias de tipo industrial, la escalera de hierro y otros detalles le imprimen un aire cosmopolita al local.

 

Para reforzar los diversos ambientes se ha planteado un juego de alfombras en el pavimento de los suelos, reforzadas en altura con las estructuras colgadas de tipo industrial desde la que se va a suspender toda la iluminación.

De este modo se consigue que el espacio conserve su escala sin perder la calidez y la confortabilidad. Los ambientes quedan también reforzados por los diferentes materiales utilizados en el pavimento: madera, baldosas de cerámica y hormigón pulido con elementos decorativos superficiales en las paredes salvo en la escalera que destaca un mosaico realizado en hierro y cristales antiguos simulando puertas y ventanas con iluminación trasdosada.

 

 

En el techo y local siguen ocurriendo cosas. Todos los volúmenes y elementos que aparecen por funcionalidad -la barra, el aseo de discapacitados, la zona de lavado- en la planta baja se han dejado a una altura inferior a los 3 metros, conservando los techos la altura original del local. De esta manera se amplía la sensación espacial y se integran en la decoración las diferentes áreas de trabajo.

El mobiliario combina el estilo vintage y el clásico renovado, con piezas recuperadas y antiguas, creando ambientes acogedores y facilitando la funcionalidad del local como restaurante y cafetería pero con diseño y personalidad.

 

El secreto e hilo conductor en el proyecto de decoración lo marca el uso de materiales que conectan con los cinco elementos del feng shui e imprimen personalidad y energía al espacio: metal, madera, agua, fuego y tierra.

Metal en la estructura de hierro del magnífico jardín vertical, en las instalaciones vistas de A/A y las cubiertas y lámparas de hierro y aluminio de los techos, en la escultura móvil que emerge de un pilar y en las sillas de bistró recuperadas. El conjunto confiere al invernadero fuerza y liderazgo.

 

Madera en las estanterías fabricadas con vigas de las paredes y el suelo de roble macizo. En las mesas y bancos antiguos. La madera proporciona calidez a la decoración industrial, acoge y abraza. Es un magnífico mensaje de bienvenida para la entrada.

Agua en las plantas y manando constante en una pila antigua de piedra dando movimiento y fluidez al lugar, invitando a parar, quedarte, pensar y soñar.

 

 

Fuego en la iluminación cálida con led de las estanterías, en las lámparas en suspensión, en las velas. La iluminación del local está perfectamente estudiada para todos y cada uno de los rincones y pensada para cada mesa creando múltiples espacios íntimos para preservar la intimidad de los comensales pero haciendo a la vez el espacio abierto, animado y vitalista.

Tierra en baldosas de los suelos en combinación con la madera dando estabilidad, carácter y personalidad. También en los detalles y los colores, en el magnífico collage realizado con mapas en sepia…

El uso de estos cinco elementos confiere una energía al local y ésta provoca sensaciones. Nos invita a sentarnos, relajarnos, concentrarnos y sentirnos abrazados.