La Casita, un regalo de los arquitectos Anna & Eugeni Bach a sus hijos.
Que tus padres sean arquitectos es un punto a favor para que se haga realidad aquello que todo niño (y adulto) desearía: una casa a medida para jugar y dejar volar la imaginación. Cuando sus hijos Uma y Rufus preguntaron a los arquitectos barceloneses Anna & Eugeni Bach por qué no hacían una casita para ellos como hacían con el resto de la gente, los padres no buscaron ninguna excusa. Dicho y hecho. Ante tal entusiasmo, el sueño de sus hijos tomó forma en apenas dos semanas en el jardín de la granja que sus abuelos tienen en el sur de Finlandia.
A continuación puedes ver el vídeo de la construcción de La Casita:
Pero como todos los que hemos sido niños sabemos la fantasía infantil es infinita y aquel espacio a priori doméstico puede convertirse repentinamente en las mazmorras de un castillo medieval o en la torre principal desde la que disparar flechas a los enemigos. Las escotillas plegables sirven para hacer respirar el edificio pero también son un elemento de divertimento.
La casa de juegos ha sido pintada a rayas asimétricas blancas con una doble finalidad: emular las antiguas casetas de playa donde la gente se ponía el bañador y plasmar el paso del tiempo, pues la madera sin tratar irá adquiriendo un tono grisáceo con los años. Como los niños, que irán haciéndose mayores y recordarán la lección que querían transmitirles sus padres: con esfuerzo uno mismo puede fabricarse sus propios sueños.
Ficha técnica:
Arquitectos: Anna & Eugeni Bach Colaboradores: Uma y Rufus Bach Fecha de proyecto: Del 20 al 21 de julio de 2011 Fecha de inicio y finalización de la obra: Del 10 al 24 de agosto de 2011 Superficie construida: 13,50 m2 Presupuesto total de la obra: 800 € Nombre del promotor: Uma y Rufus Bach Constructor: AutoconstruidoEmplazamiento: Granja de Pälölä, Nummi Pusula, Finlandia
Fotografías de Tiia Ettala