Boathouse, una casita tradicional de pescadores noruegos reconvertida en residencia de verano.
La estructura original había sufrido mucho por la humedad y el paso del tiempo, por lo que tuvo que ser derribada. Con todo, se respetó el emplazamiento, aunque la base de la nueva estructura se apoya directamente en el suelo montañoso para ser más estable. Los diseñadores se inspiraron en sus líneas sencillas y en el buen uso de sus materiales a la hora de proyectar la nueva Boathouse.
Se reutilizaron muchos materiales como las ventanas de una granja cercana u otros de la vieja construcción para revestir las superficies interiores de la nueva casa. El edificio se mantiene fiel a la herencia histórica y cultural noruega.
El revestimiento exterior está hecho de pino noruego, impregnado con un producto biológico derivado de la producción de azúcar. ¿Las ventajas? No requiere mantenimiento y con el tiempo esta capa le dará a la casa una bella pátina de color gris plateado.
La fachada sur está compuesta por contraventanas que se levantan fácilmente gracias a una barra con pivotes acero, consiguiendo crear una zona al aire libre protegida por un falso techo. Están revestidas por unas lonas textiles dotadas de un sistema de retroiluminación que dan una luz ambiente de lo más acogedora.
Ideal para tomarse un plato de delicioso salmón noruego mientras se contempla la puesta de sol. Un cuadro de lo más bucólico.
Ficha técnica
Proyecto: Boathouse Estudio: TYIN Tegnestue Arquitectos: Marianne Løbersli Sørstrøm y Yashar Hanstad Localización: Aure Kommune, More org Romsdal, Noruega Año de finalización del proyecto: 2011 Presupuesto: 45.000 USD
Fotografías de © Pasi Aalto