Una casa abierta al paisaje del Montseny y volcada en si misma, de CPVA Arquitectos.
Los arquitectos han diseñado, a partir de las preexistencias ambientales y de la orientación, una casa-mirador al paisaje, bien orientada y protegida de las miradas no deseadas desde la calle.
Desde el acceso, la visión está dominada por un muro de piedra caliza que cierra el patio. La misma planta de la casa protege el jardín posterior de vistas indeseadas, mostrándose como una caja cerrada. Por el contrario, la visión de la casa desde la piscina muestra una casa totalmente abierta con una transparencia hasta el fondo del patio interior.
A medida que nos aproximamos a la casa, el pavimento se reduce y el césped va ganando terreno, hasta que arbustos y césped se convierten en una prolongación del espacio natural, perdiéndose intencionadamente los limites entre la parcela y el campo. Además, el jardín se ha repoblado el jardín con árboles y arbustos típicos de la región mediterránea, para romper la frontera entre lo natural y lo humanizado.
La casa se organiza entorno a un patio; patio que de espaldas a la calle recoge luz y sol, permitiendo situar todas las estancias alrededor del mismo, con un estar-comedor como pieza principal, abierto totalmente al Norte (paisaje) y al Sur (sol y luz del patio).
La fachada acristalada del patio actúa como espacio de circulación y conexión del programa de la vivienda, haciendo que la relación entre el exterior y el interior se diluya.
El patio es el espacio protagonista de la casa, presente en la vida cotidiana y con la flexibilidad suficiente para adaptarse a los diferentes usos, pudiendo abrirlo o cerrarlo según el deseo de comunicarlo con el paisaje exterior o siendo un espacio privado de la vivienda al aire libre.
En el interior de la casa prima la austeridad. El pavimento continuo de roble natural rinde homenaje al viejo ejemplar que perdura en el jardín. Las vistas y la luz del patio también son protagonistas; esta última se canaliza hacia el interior de los espacios de la vivienda sin encontrarse obstáculos a su paso.