Donaire Arquitectos proyecta un juego de contrastes en el Teatro de Almonte, en Huelva
El Teatro Municipal Salvador Távora, diseñado por Donaire Arquitectos, se sitúa en los terrenos de una antigua bodega en Almonte (Huelva). El reto del estudio era el de construir un nuevo edificio integrando e incorporando las edificaciones circundantes declaradas Bien de Interés Cultural. El teatro fue inaugurado el pasado mes de febrero.
El contraste entre edificios se hace patente también en el uso de materiales. Para la nueva edificación se ha utilizado material pétreo (GRC) en grandes piezas, mientras que en las edificaciones anexas rehabilitadas se ha mantenido el material cerámico de pequeñas dimensiones (ladrillo).
La propuesta consta de dos volúmenes contundentes que, integrados en el entorno, se separan de las edificaciones medianeras con patios interiores. El vestíbulo articula la unión entre ambos. En uno de los volúmenes se sitúa la sala central en la que se han utilizado materiales como la madera maciza que enfatizan la escala humana de suelo y paredes hasta cierta altura. Para contrarrestar con la escala monumental se han utilizado materiales más fríos.
En el interior del teatro, los espacios se crean mediante vacíos y llenos, jugando con el contraste y el uso de luz natural que proviene de varias direcciones.
Uno de los volúmenes, en el cual se sitúa la cafetería, aparece suspendido dejando un gran espacio en la parte inferior que hace las veces de umbral. Además, de aportar un espacio de sombra, se aprovecha este espacio para ubicar el vestíbulo, de escala monumental. Una vez más existe un juego de contrastes entre ambas escalas.