Aquellos comunistas soñadores y sus locas, locas, arquitecturas.
Taschen recopila la arquitectura de los últimos años de la URSS.
Hubo una vez un país llamado Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, cuyo proyecto social estaba basada en una serie de postulados idealistas (igualdad, progeso, racionalismo) que inspiró a algunos de los mejores arquitectos de la primera mitad del siglo XX. Suena bien, ¿verdad? En la realidad, casi todo les fue mal a los habitantes de ese país desde el principio. Y sus arquitectos se quedaron sin la inspiración socio-política de los buenos tiempos. Pero les quedó el aire quijotesco durante décadas y décadas. Y, por eso, en los años 70, hubo un insólito florecer de la arquitectura.
Visto en El Mundo