Tokyo Baby Café de Nendo, una cafetería para familias diseño-adictas.
La estética de los locales definidos como “familiares” suele abominar a muchos padres que no quieren verse invadidos por parafernalia tipo Disney o similares. Aunque, ciertamente, los niños pequeños son difíciles de encajar en sitios demasiado cool. El Tokyo Baby Café, diseñado por Nendo y situado en la elegante zona comercial de Aoyama (Tokio), es el ejemplo de un buen compromiso entre vida familiar, comodidad y diseño contemporáneo.
Un establecimiento agradable concebido por Nendo para que los padres tomen tranquilamente un café con otros amigos -adultos-, mientras sus retoños corretean por el local sin poner en peligro los nervios de sus progenitores.
La cafetería, por supuesto, dispone de todas las facilidades habituales de los locales familiares: cuarto de juegos, cientos de libros y juguetes, habitaciones para cambiar pañales y dar de comer a los bebés con privacidad, pasillos anchos para cochecitos, enchufes a una altura fuera del alcance de los pequeños…
Una de las novedades interesantes en el Tokyo Baby Café es el diseño de muebles a dos escalas, una de adultos y otra de pequeños. Hay mesas grandes y mesitas, sofás para padres que son camas los niños, cuadros colgados a diferentes alturas, o sobres de mesas decorados como tejados por su parte inferior. Incluso hay ventanas altas y ventanas bajas, para que todos los clientes puedan observar las vistas. El contraste entre lo grande y lo pequeño crea un cierto efecto “Alicia en el País de las Maravillas”, y los colores agrisados, casi cercanos al celeste, recrean un mundo infantil visualmente soportable para padres estéticamente exigentes.