La casa de madera mimetizada en la falda del Montseny
El proyecto se ubica en Seva, una población de Osona junto al parque natural del Montseny. El solar, delimitado por dos calles, se caracteriza por tener forma triangular, buena orientación y mucha pendiente.
En búsqueda de espacios cálidos, íntimos y de baja demanda energética
Hay veces que una construcción se convierte en un reto personal. Para satisfacer las demandas de los clientes, el proyecto de Seva de Alventosa Morell se basa en dos estrategias. La primera de ellas es situar la casa en lo alto y llano de la parcela, situando el acceso al norte y eliminando los movimientos de tierras innecesarios.
La segunda estrategia es instaurar un sistema estructural y constructivo que permita crear un espacio diáfano en el que ubicar las piezas principales de la casa, pero, al mismo tiempo, generar intimidad respecto a las viviendas vecinas situadas en la calle superior, justo al norte de la parcela.
Para conseguir estos objetivos se ha creado un sistema estructural de pórticos de madera que generan dos espacios diferenciados: los espacios húmedos y cerrados situados en el norte bajo una cubierta plana, y el resto de los espacios situados en una cubierta inclinada.
Los pórticos inclinados modulan un espacio diáfano donde encontramos el porche, la sala de estar, el comedor, cocina y habitaciones de forma sucesiva. Todos ellos abiertos al sur y al jardín, lo que permite disfrutar de las vistas y la radiación solar.
Una coraza a base de leño negro
Con el fin de enfatizar la estructura ligera que sustenta la casa, las fachadas cerámicas ayudan a generar un carácter pétreo y más íntimo respecto a los vecinos, llegando sólo hasta la altura del dintel de las ventanas. En cambio, un gran sombrero a modo de cubierta y fachada de madera se convierte en el resto de la envolvente de la casa.
Este sombrero se enfatiza tanto en el exterior como en el interior. En el interior la cubierta de madera de pino y los tragaluces separan la fachada de obra. En cambio, en el exterior una fachada ventilada de madera tintada en negro y la cubierta de tejas negras remarcan la voluntad de crear este sombrero que parece flotar sobre la obra cerámica.
El diseño bioclimático basado en la captación solar situada en el sur, la protección lumínica durante el verano, el uso de un envolvente de altas prestaciones térmicas y la ventilación cruzada son factores que permiten reducir mucho la demanda energética. Por este motivo se prescinde de sistemas de refrigeración y el disfrute del confort térmico en invierno es posible gracias a una única estufa de pellets.
La construcción de Alventosa Morell Arquitectos se ha efectuado bajo el máximo respeto al medioambiente. Por ello, la madera se percibe como elemento principal. Además, la obra cerámica ha sido cocida con biomasa para ser menos contaminante, y se ha preservado la naturaleza existente en el espacio trabajado.