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El estilo mid century de Mad Men impregna esta reforma en Oporto.

La reforma de este apartamento luso ubicado en un edificio de 1956 ha logrado una distribución funcional restaurando y respetando la esencia original. Maderas, pavimentos y detalles arquitectónicos nos trasladan al pasado desde lo contemporáneo.

Modernizar con respeto al pasado

Ubicado en el último piso de un edificio de 1956, este apartamento reformado por el estudio Hinterland, en Oporto, es el ejemplo perfecto de cómo intervenir con respeto un espacio. Modernizando la estructura y distribución, se ha logrado un piso mucho más funcional y adaptado a las nuevas necesidades. Al mismo tiempo, se ha respetado el diseño original, restaurando algunos elementos y creando otros inspirados en el estilo del siglo XX. Está ubicado en el último piso de un edificio de 1956, donde su intervención es la modernización del departamento sin comprometer el diseño original.

Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Plano
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Comedor
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Comedor

Un diseño original muy peculiar

Construido a finales de los años 50 y diseñado por los arquitectos portugueses Arménio Losa y Cassiano Barbosa, el edificio tiene un encanto propio que ha sido respetado. En aquel diseño, se planteó como un espacio exterior semipúblico. Durante la construcción, sin embargo, se crearon dos apartamentos simétricos, al igual que en el resto de las plantas del edificio. Este cambio programático es responsable de algunos de los elementos formales más singulares del apartamento. Entre ellos, los elementos estructurales de hormigón y el tamaño de las ventanas, que representan el 55% de la superficie de la fachada.

Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Comedor
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Salón
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Salón

Las claves de la reforma

En la reforma, el objetivo era transformar el apartamento original de tres dormitorios en un espacio más cómodo. Así, sus 80 metros cuadrados terminaron ubicando dos dormitorios, una oficina y una biblioteca. Una solución perfecta para sus propietarios: una pareja joven con un niño. Todo ello, sin comprometer el estilo inicial.

Además de estas zonas privadas, se definió un espacio central abierto donde la familia pasa la mayor parte del tiempo. El área de esta zona se aumentó demoliendo algunos muros interiores. En ella se encuentra la sala de estar, el comedor, la biblioteca y la oficina.

Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Salón
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Estudio. Estanterías
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Cocina verde

Los diversos espacios se organizan con tres tipos de elementos de carpintería, sueltos o alineados a la pared. El resto de espacios son secundarios y reducidos al tamaño mínimo con paredes repletas de armarios para colocar electrodomésticos, infraestructuras y almacenaje.

Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956.. Estanterías
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Estanterías
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Dormitorio
Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Armarios

Materiales cuidados

La elección de los materiales se ha basado en los que estaban presentes en el proyecto original. Así, se restauraron los pavimentos y puertas de madera originales. Los suelos de terrazo existentes fueron sustituidos por otros nuevos que suben por las paredes de estuco. Los elementos de madera natural utilizan la caoba del proyecto original, y los empastes pintados de madera clara se sustituyen por MDF lacado y coloreado. El tono oscuro de la carpintería equilibra la luminosidad natural que aportan los grandes ventanales.

Una reforma en Oporto que respeta y moderniza el estilo original de 1956. Baño

Fotografías: Ivo Tavares

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