Kiwi Bravo para Parachilna. La escenografía perfecta.
Si de algo puede presumir la compañía de iluminación Parachilna, establecida en 2013 en la Colonia Güell, es de haber sabido elegir buenos compañeros de viaje. Y es que, sin duda, rodearse de talento es la piedra angular del éxito de una marca.
Parachinla atinó en elegir qué diseñadores necesitaba para construir su marca. La compañía de iluminación, cuyo nombre se inspira en un pequeño pueblo australiano, se presentó a lo grande hace cinco años contando con colecciones de vacas sagradas como Jaime Hayón o Stephen Burks. Posteriormente siguieron su estela Neri&Hu en 2014 y más recientemente Luca Nichetto en 2016.
Un oasis en medio de un entorno industrial
Este año el acierto ha sido rotundo dejando en manos de Kiwi Bravo la escenografía y fotografía de su nuevo catálogo 2018/19. En un entorno industrial y aparentemente austero, los creativos han escenificado un pequeño oasis con estructuras en tonos rosa viejo, azul klein, teja y limón, amenizados con plantas verdísimas. Su montaje consigue realzar la calidad y funcionalidad de las lámparas, priorizando la importancia del proceso de fabricación manual de éstas.
Y para redondear el bello catálogo, la dirección de arte y diseño de éste han sido obra de Lo Siento, el estudio liderado por Borja Martínez. Por otro lado, las ilustraciones de los diseñadores están realizadas por el actualmente solicitado Marc Pallarés.
The Silence of the Lamps
El nuevo catálogo de Parachinla, cuyo título es un claro un guiño a la película de los genuinos Clarice Starling y Dr.Lecter, hace un completo recorrido por todas las propuestas iluminarias actuales de la marca. En él, los diseñadores explican en qué se inspiraron para crear sus colecciones, desde las tradicionales linternas chinas de Neri&Hu, las lámparas asiáticas con cuerpo de cerámica de Jaime Hayón o la versión S.XXI de los clásicos difusores esféricos de Luca Nichetto, hechas con vidrio soplado veneciano y pie metálico.