Rafael Salvador recupera a Coderch de la mano de TUNDS.
Rafael Salvador es el alma mater de TUNDS, una microeditora de lámparas, como él mismo lo define, que nació a partir de un croquis en una servilleta de papel guardada por la hermana del conocido arquitecto José Antonio Coderch. Era el croquis de lo que se convertiría en la lámpara CISTER. El respeto a las creaciones de su tío abuelo, autor de la premiada DISA o “Lámpara Coderch”, es una constante en las obras de esta pequeña empresa que produce entre España y Alemania. Rafael, una persona inquieta, detallista y perfeccionista, nos habla con pasión del proyecto.
¿De dónde nace la idea de crear TUNDS?
Hace 13 años, mi tía Mercedes, hermana de José Antonio Coderch, me dejó sobre la mesa una servilleta de papel con un esbozo en lápiz a mano alzada de una lámpara a base de cilindros concéntricos y con un nombre. Se trataba de la lámpara CISTER. Fue como un flechazo: un tesoro encontrado. El croquis estimamos que era de los años 50. Yo creo que ese trozo de papel me pidió que lo rescatara de aquel letargo. A partir de ahí, TUNDS nace casi como un juego y guiado por una enorme pasión. Con el soporte de la familia Coderch se inició la interpretación del dibujo de la servilleta de papel. Solo teníamos ese croquis sin más detalles. Años más tarde, aparecieron más esbozos de gran ayuda para determinar las proporciones que definió su creador.
A partir de ese esbozo que había dibujado Coderch empiezas a darle forma a la primera lámpara.
Si, en el garaje de casa, rodeado de los aviones teledirigidos de mi padre, empecé a hacer maquetas con madera, plástico y restos de aluminio. Me pasaba las tardes haciendo croquis, dibujando y maquetando. No había hecho nunca una lámpara, pero había visto en casa como mi padre, de la nada, hacía un avión increíble que además volaba. Tras dos años de intentos y fracasos, un día tuvimos una maqueta de lámpara funcionando y un plan para iniciar una pequeñísima producción. Diseñamos un logotipo y presentamos la inédita lámpara CISTER al mercado. Por aquel entonces, producir más de 10 lámparas era un reto que me generaba vértigo.
Los inicios nunca son fáciles. ¿Cómo fueron los vuestros?
Cierto, los inicios son el examen a tu pasión. Durante años llevé literalmente una lámpara bajo el brazo. Recorrí España visitando tiendas de iluminación que seleccionaba en internet. Desde luego, moral no me faltaba, pero tampoco me costaba hacerlo. Sentir la realidad en tu propia piel ayuda a dimensionarte y también a descartar alguna opinión ajena. Siempre he pensado que aprender es en realidad equivocarte rápido. Montamos una página web muy sencilla pero operativa, que ya hemos renovado y hemos abierto perfiles en Facebook e Instagram.
Imagino que los primeros pedidos que recibiste son inolvidables.
Desde luego! Los cuatro primeros pedidos los hicieron la Cooperativa d’Arquitectes Jordi Capell, Vinçon, Punto Luz e Ideas Luz. Fueron una inyección de ánimos imborrable y quiero agradecerles esa confianza inicial “a ciegas” que tuvieron en TUNDS, así como al resto de distribuidores que apoyan nuestro proyecto día a día.
¿Y desde entonces, cómo ha evolucionado el proyecto?
Actualmente editamos dos modelos de lámpara, la DISA y la CISTER con un total de siete versiones. Y en breve ampliaremos nuestro catálogo con un nuevo modelo en cuatro versiones. Nos gustaría también iniciar una línea nueva basada en nuestros propios diseños.
Cuéntanos un poco sobre ese nuevo modelo de lámpara que estáis a punto de lanzar al mercado.
Este nuevo modelo está siendo validado por los herederos de Coderch para su posterior desarrollo. Se ha puesto mucha pasión, ilusión y sobretodo respeto. Me gustaría poder dar más detalles pero por ahora no os puedo contar mucho más. Esperamos que en unos pocos meses esté todo listo para salir al mercado.
¿Cual es el proceso que sigues a la hora de editar los modelos?
Empiezo dibujando a mano. Una vez tengo las piezas y su conjunto en tres dimensiones, la dibujo en el ordenador. Disfruto mucho con el “durante” del proceso. A veces salto de la cama para dibujar una idea antes de que se me olvide. La inspiración es maleducada: se auto-invita, llega sin avisar y hay que aprovecharla!
¿Cómo has llegado hasta aquí?
Cuéntanos un poco sobre tu trayectoria personal. Estudié Ingeniería de Telecomunicaciones en Barcelona. Me dedicaba a la consultoría de sistemas informáticos de gestión, cuando inicié mi andadura en el mundo de la iluminación. A mis 45 años, creo que la vida está para perseguir tus Sueños. Si no los persigues es posible que se apaguen. Dedicarse a explotar las virtudes de cada uno es un camino interesante, cuando haces aquello que te sale bien con relativo esfuerzo y alto rendimiento, la satisfacción está asegurada.
¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
Me gusta y necesito mucho el deporte y la música. Correr por la orilla del Main, el afluente del Rin que pasa por Frankfurt, es realmente agradable. Y mi segundo gran sueño es aprender a volar. Soy inquieto y me gusta el cambio, leer cosas diferentes, novedades de diferentes sectores es algo que siempre me ha atraído. Me gusta conversar: gente escogida y disponible. Esas conversaciones en las que el tiempo vuela y no te das cuenta y se han hecho las tantas.
Queremos agradecer a Rafael Salvador el tiempo que nos ha dedicado para poder realizar esta entrevista.
Entrevista, fotografía y textos equipo Slowkind
Productora de contenidos digitales y editoriales. Creamos historias para inspirar, motivar y compartir – slowkind.com