Karakter: el mejor diseño italiano lleva sello danés.
La firma danesa lleva años rebuscando entre los archivos de la historia del diseño para descubrir productos bien hechos por autores de la talla de Achille Castiglioni o Joe Colombo. Artículos en los que el gusto por el material de calidad y la resolución sencilla a problemas cotidianos son bandera, y que por ello hermanan el buen saber hacer del diseño italiano con el minimalismo estudiado que los nórdicos han exportado al mundo.
Los muebles del maestro Castiglioni eran los primeros que conseguían dejarnos sin respiración en el pequeño show montado en Milán. Entre ellos la estantería Wire realizada junto a su hermano Pier Giacomo hace cincuenta años, fruto de la continua reconceptualización y reinvención que era seña de identidad de su estudio y que reduce el concepto de estante como soporte a su mínima expresión: tres baldas y un hilo metálico para unirlas.
Junto a Giancarlo Pozzi creó otra de las novedades de Karakter el gran Achille: Comodo, un curioso mueble auxiliar que, según dicen las malas lenguas, utilizaba el maestro para guardar sus chucherías. Una pieza versátil y, como su nombre indica, cómoda y adaptable a cualquier rincón.
Pero también en solitario se desenvolvía el menor de los hermanos que abanderan el diseño italiano: buen ejemplo de ello es Lungangolo. Su reflexión sobre los espacios perdidos -pulgadas vacías y metros cuadrados que pueden ser ocupados por un diseño bonito- da como resultado este conjunto de estantes inspirados en Bernini destinado específicamente para las esquinas de la casa.
Cuatro pilares esbeltos con secciones transversales cuadradas en el medio para apoyar las estanterías cuadradas situadas en varias alturas. La estructura se refuerza por un cajón y una pieza lateral. La posición del cajón y la eliminación de una parte del apoyo hace que sea fabricado en dos versiones: orientado a izquierda y derecha.
Otro grande del diseño italiano, Joe Colombo, también ha visto sus productos editados por Karakter. Entre ellos nos quedamos con el icónico Pouf, que abre el artículo: elegante, confortable, atemporal y contemporáneo. Tan relevante hoy como cuando fue diseñado, en los años 60.
Pero el registro de Karakter Copenhagen no queda ahí. El buen diseño no sólo se encuentra en el pasado, por lo que la firma también recoge algunos de los diseños mejor desarrollados de diseñadores contemporáneos o nuevas generaciones que, inspiradas en los grandes clásicos, realizan piezas fuera de lo común y corriente.
Entre ellos nos quedamos con un diseño de iluminación, Awkward Light, una creación de las sudafricanas Anatomy Design. Una lámpara peculiar y curiosamente proporcionada para garantizar el equilibrio, que sirve para iluminar dos zonas próximas. Contradicción y personalidad que se definen gracias a su nombre: awkward es raro en inglés.
En palabras de la marca, «Todos los diseñadores de Karakter Copenhagen son escogidos por sus ideas y creatividad, y compartimos con todos ellos un nivel inspirador de la productividad y una especial relación con el diseño».