Imagen para Bentply de Richard C. Evans, o cómo homenajear la historia del mueble en una tarjeta.
La silla de madera curvada de Summers, diseñada en 1934 y formada por una sola plancha de madera, sirve de inspiración y modelo. Esta silla supuso una auténtica revolución en la época, por conseguir ese ideal de diseño que es un objeto de una sola pieza: un patrón simple que separa las patas traseras de la parte posterior y los apoyabrazos, plegando en curvatura continua cada segmento en diferentes direcciones. Forma parte de las colecciones permanentes del MoMA de Nueva York y el Victoria & Albert Museum de Londres.
Con este concepto en mente, Evans ha creado una miniatura de la silla sobre un cartón que se corta y pliega. Para conseguir un material que tuviera flexibilidad y resistencia, y que no quebrara al doblarse, se empleó en las tarjetas un cartón formado por tres capas, que hace además referencia al material del que está hecha la silla: contrachapado de madera.
La Bauhaus ha sido otra gran fuente de inspiración, motivada por el hecho de que dos de sus grandes nombres, emigrados por culpa de la Segunda Guerra Mundial, trabjaron para Isokon: Walter Gropius y Marcel Breuer. Esta influencia se deja notar en la tipografía elegida en la tarjeta.