Más allá del Tibidabo el Modernismo continúa; al cruzar la sierra de Collserola Gaudí sigue siendo una referencia. Y eso se puede ver en el centro de Sant Cugat del Vallès, donde el mercado viejo, el Mercat de Sant Pere, ha abierto de nuevo sus puertas y se ha convertido en un espacio gourmet en el que patrimonio y buen gusto van de la mano.
Proyectado a comienzos del siglo XX por Ferran Cels y con claras influencias de Puig i Cadafalch, el edificio presenta elementos arquitectónicos y funcionales propios del Modernismo: el ladrillo visto, las ventanas trapezoidales, las pilastras y el uso del hierro. El edificio original está formado por una sola nave, a la que se le añadió una nave más pequeña en la parte posterior destinada a la venta de pescado, y también un cuerpo adosado a la fachada principal destinada a otros usos.
Básicas en la estructura del edificio del mercado son las ventanas, de diferente altura siguiendo el ritmo de la bóveda de la nave. Están separadas en dos pisos por una línea de impostas, y se tapan cuando es necesario con persianas de ventilación.
Las fachadas laterales están coronadas por un cuerpo que se alza en forma de almenas molduradas. La decoración con ladrillo visto alterna con baldosas de cerámica de temas florales, tan característicos del Art Nouveau catalán.
Con la rehabilitación, la fachada se ha abierto más al exterior, eso sí respetando la huella del Modernismo, que se marca en la forma de piezas de hierro con delicados adornos florales. Se ha convertido así en un elegante mercado del siglo XXI, con productos de alta calidad para comprar y degustar.
Una decena de comerciantes y restauradores ofrecen la mejor fruta, pescado, legumbres, platos peruanos, italianos, japoneses, carnes, embutidos, salchichas gourmet, vinos, pan y pasteles para comprar o para comer en las barras, en las mesas que rodean las paradas o en la terraza del mercado, situada en la plaza del mismo nombre. Además, el mercado acoge cada mes showcooking, catas, talleres y otras experiencias para foodies. Una propuesta lúdico-gastronómica que complementa la amplia oferta comercial del casco antiguo de Sant Cugat, auténtico polo de atracción para los vecinos del Vallés.
Además de instalarse en una joya arquitectónica, el nuevo mercado goza de una situación privilegiada en el centro de Sant Cugat. Un punto de encuentro para los vallesanos y a sólo 15 minutos de Barcelona.
Mercat Vell
Plaça de Pere San
08172 Sant Cugat del Vallès, Barcelona
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