Restaurante Shed 5, pasado industrial con influencias griegas en Melbourne.

Mariola Montosa

15 noviembre 2012

Melbourne se suma a la práctica de convertir una zona industrial abandonada en el lugar más cool de la ciudad. En este caso, el puerto, y en concreto los viejos edificios de la zona de muelles. Pasado industrial que busca ser la zona de restauración más en boga de la antigua capital de Australia.

Por ejemplo con el Shed 5, un singular local que añade a la herencia industrial influencias griegas en homenaje a las raíces del chef, Vas Donoudis, y a Stan Sarris, una de las cabezas de loopcreative, el estudio responsable de todo el diseño.

En realidad el compromiso de loopcreative va más allá de este proyecto. El estudio forma parte del equipo encargado de desarrollar toda la estrategia para los cinco mil metros cuadrados que ocupan estos edificios del siglo XIX a orillas del río Yarra.

La seña principal de este restaurante de 120 comensales es la pared longitudinal de baldosas blancas. Que a su vez es la encargada de aportar un sutil toque griego, al combinar los colores blanco y azul para dibujar el logo del restaurante.

Esta pared está rematada de un extremo a otro por una banqueta de cinco toneladas de acero laminado y remachado que sirve de asiento para las mesas dispuestas en esta parte del local.

Como detalle, destacan las luminarias insertadas en la pared, las cuales han sido recuperadas de una antigua estación de tren. Entre el mobiliario de vanguardia, se han escogido las sillas de Prouvé para Vitra.

Enfrente están la barra y la estantería. Realizadas también con acero, siguen la misma línea que en el banco longitudinal. Lo que proporciona un acabado funcional y sobrio.

El acero y la madera son los materiales principalmente utilizados, compartiendo protagonismo a partes iguales. Juntos están presentes en la propia barra, las mesas, las sillas y los taburetes.

Y si el acero brilla en los laterales, la madera lo hace en el entarimado. Aunque resplandecen poco pues se trata del suelo original del local: tablones de madera con más de un centenar de años.

Para loopcreative era importante que el restaurante mantuviese parte de su vieja identidad, por ello también han conservado lo que antes era una oficina de billetes y aduana reconvirtiéndola ahora en una bodega y un reservado.