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Proyectar el vacío: una vivienda monocromática en Barcelona que desdibuja los límites

El estudio catalán Allaround LAB ha transformado una vivienda situada en la ciudad condal evitando mercantilizar los metros cuadrados de la misma. El programa funcional propone varios espacios diáfanos no programados alrededor del baño y la cocina, las dos únicas piezas fijas.

El difícil reto de no mercantilizar los m2 de una vivienda

La presión constante del mercado inmobiliario -cada vez más agresivo- hace que grandes inversores y pequeños propietarios busquen rentabilizar al máximo los m2 de sus viviendas. En urbes como Madrid, Barcelona o Valencia es cada vez más usual encontrarse promociones y reformas en rentabilidad que exprimen cada rincón para ofrecer más habitaciones. Este proceso de especulación tiene como resultado viviendas poco funcionales que dejan muy poco margen para la personalización.

Espacios no programados en la vivienda en l´Eixample por Allaround LAB
Azulejos color azul en esta vivienda en l´Exiample por Allaround LAB

Por suerte, aún existen clientes que confían en estudios de arquitectura e interiorismo concienciados en ofrecer viviendas dignas al mercado. Ejemplo de ello es el estudio catalán Allaround LAB, liderado por Noelia de la Red y Jordi Ribas. «Abogamos por transformar la concepción de la vivienda, dejando de considerarla como una mercancía definida por su valor de mercado para entenderla como una infraestructura definida por su potencial de uso«, afirman los arquitectos. Esta concepción la han trasladado a uno de sus últimos proyectos; una vivienda de 67m2 situada en l´Eixample de Barcelona que consiste en abrir y vaciar el espacio.

Estructura metálica en color azul en esta vivienda en l´Exiample por Allaround LAB

El espacio útil se compone de vacíos no programados

Inicialmente el piso, construido en 1910, contaba con una distribución de estancias muy compartimentada. Llegando incluso a tener habitaciones sin ventana. Es por ello que la primera decisión que tomó Allraound LAB fue eliminar todas las particiones existentes y definir únicamente las dos únicas piezas fijas que se necesitan para habitar un lugar: la cocina y el baño.

De este modo, alrededor de estos espacios servidores se establecen una serie de vacíos no programados con la intención de no forzar ningún uso y dejar libertad para que cada usuario configure la vivienda según sus necesidades domésticas. Además, la presencia de múltiples puertas correderas en estos vacíos permite un recorrido espacial y visual continuo, posibilitando la simultaneidad de actividades.

La cocina con aspecto escultórico de AllaroundLab

Vale la pena mencionar la cocina de esta vivienda en l´Eixample. Transformada en una pieza de mobiliario, con frentes y encimera en color blanco, se convierte en el epicentro del proyecto como si de un objeto escultórico o monolito se tratase.

Cocina en color blanco en esta vivienda de Allaround LAB

Por último, el color azul permite dotar de coherencia a la concatenación de espacios. Además de ser utilizo para pintar la estructura metálica existente y también está presente en las baldosas vidriadas que enfatizan y definen el área operativa de la cocina y el baño.

Fotografía: José Hevia

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