Muller Van Severen diseñan el sofá más gustoso del mundo.
Su nombre lo define con exactitud. The Pillow Sofa es, por encima de todo, blandito y mullido como una apetecible almohada. Se trata de una evolución de las Pillow Bags que diseñaron el año pasado para la marca de moda KASSL y que obtuvieron un éxito abrumador. Ahora evoluciona en versión sofá manteniendo toda su esencia.
Muller Van Severen x KASSL Editions
En un ranking sobre los sofás y butacas más esponjosas del mundo, seguramente The Pillow Sofa lograría una posición aventajada. Y es que el nuevo diseño del dúo belga Muller Van Severen da ganas de desplomarse sobre él y acurrucarse frente a una chimenea con un buen libro y una copa de tinto.
La idea parte de un diseño anterior que Hannes Van Severen y Fien Muller crearon para KASSL Editions en 2019. Entonces, concibieron una bolsa utra-suave, de originales colores y con un material la mar de resistente. Su estética seguía el mood de los abrigos de la marca alemana, fundada hace un par de años con el objetivo de reinventar la clásica chaqueta de pescador y convertirla en una prenda moderna y atemporal.
A raíz del éxito que obtuvieron las bolsas, los belgas han sido invitados a ampliar la colaboración. En esta ocasión han barrido más para su terreno, el del diseño de mobiliario, extrapolando el concepto de las Pillow Bags (que, por cierto, se venden numeradas para garantizar su autenticidad) a un sofá y una butaca.
The Pillow Sofa
Tanto el sofá como la butaca tienen una naturaleza modular que recuerda al concepto DIY, como si uno mismo pudiese montarse la butaca o el sofá a su gusto y necesidades.
La butaca se compone de tres grandes cojines se se abrazan entre sí a través de una asa. El resultado es una estructura arquetípica de lo que propiamente es un asiento con respaldo.
Al igual que los abrigos de KASSL (su prenda icónica), los cojines están hechos de algodón revestido con nanocompuestos a base de aceite, totalmente sostenible y casi casi indestructible.
Los colores son otro de sus grandes qués. Inicialmente las telas se desarrollaron en color blanco, negro y aceite de camello de Limonta. Más tarde se añadieron las combinaciones de colores como el penetrante verde, el azul marino y el azul cielo.
Reinventando un mundo mejor
La piedra angular sobre la que se fundamenta KASSL -y con la que Muller Van Severen comulgan a la perfección- es el impulso de una moda más racional. La esencia de la marca se basa en conectar a los mejores creativos y fabricantes para repensar y recrear un mundo más sostenible.
En este aspecto, Hannes Van Severen y Fien Muller no pueden encajar mejor. El tándem belga, cuyo estudio se fundó en 2011, han cosechado a lo largo de estos últimos años un savoir faire basado en la reinterpretación de los objetos frente el espacio que ocupan. Su trabajo en el terreno del diseño, el arte, la arquitectura y la exploración de materiales les ha llevado a colabroar con marcas de lujo como Hermès o a asociarse con Andreas Murkudis en Berlín o The Apartment en Copenhague.