Benedetta Tagliabue responde a vuestras preguntas: resuelta, desenfadada y audaz a raudales.
Tomás: ¿Consideras que tu lenguaje en la arquitectura ha variado de manera importante desde que eres arquitecta o tu visión de la arquitectura siempre ha sido orgánica?
Creo que ha ido variando, pero con pequeños cambios. Se trata de pequeñas transformaciones que aparecen a base de repetir una idea que siempre parece la misma y al final con los años te das cuenta, comparando, que las cosas han ido evolucionando. Me parece que esto es algo que pasa de manera natural y lógica ya que el ambiente te influencia, así como los cambios de la sociedad, de las cosas que hacen los demás… la arquitectura forma parte de todos estos cambios, es una suerte de conversación abierta continua.
Yoharilin: ¿Qué crees que has aportado con tu arquitectura?
La verdad, no lo sé. Creo que quizás intentamos aportar algo de naturalidad a la ciudad, a los edificios y los objetos.
Martín: ¿Que arquitectos habéis tomado como referente Enric y tú a lo largo de los años?
Enric era una persona que cambiaba de héroe cada dos semanas. Era muy divertido para mí. Bromeábamos mucho sobre esto porque cada dos semanas decía que alguien diferente era el mejor del universo. Lo importante es tener las referencias que uno quiera. En este caso creo que Le Corbusier podría ser nuestra referencia número uno. Pero aparte de los referentes profesionales, hay muchas otras cosas que te pueden influir en la vida.
Rodrigo: ¿Qué libros de arquitectura, y especialmente aquellos que no estén relacionados con la disciplina, crees que han sido claves, tanto para ti, como para tu marido, en la formación del carácter del estudio?
Esto era algo que Enric se esforzaba mucho por hacerlo evidente. En nuestra opinión, ayudan a veces más los libros que no son de arquitectura: los de los situacionistas o de los escritores del grupo OuLiPo, por ejemplo. Es muy divertido mezclar las disciplinas y llegar a tener influencias de otros ámbitos. Esto es lo que intentamos hacer ahora en la Fundación Enric Miralles, donde no sólo trabajamos con arquitectos sino también con fotógrafos, sociólogos, cocineros… con personas de ámbitos diferentes, sobre todo para divertirse algo más.
Ana: ¿Qué te ha aportado diseñar un objeto, en este caso una silla, a diferencia de un edificio?
Me ha divertido mucho. Yo creo que diseñar un objeto donde la gente se tiene que sentar y ha de utilizarlo con su cuerpo es casi más difícil que hacer un proyecto de arquitectura. Primero, porque necesitas inventar algo, lo cual ya es muy difícil porque está casi todo inventado. Después, porque hay que hacer algo cómodo, que no es nada fácil. Trabajar con mimbre ha sido para nosotros maravilloso pues es un material que ya de por sí resulta cómodo sin tener que añadirle muelles, cojines o cosas de ese tipo. Estoy contentísima con este diseño. En el estudio no solemos hacer diseño industrial, a no ser que sea algo muy específico para un edificio, pero después de esta experiencia queremos empezar a hacer más.
Silla Tina, diseñada este año para la firma Expormim.
Paula: Soy diseñadora industrial, profesión a la que se dedican pocas mujeres. Y en este caso, ¿notas que haya alguna diferencia que se perciba en un producto diseñado por una mujer con respecto a otro diseñado por un hombre? ¿Hay cualidades que tenemos como mujeres que debemos aprovechar tanto en la idea, ejecución y venta de un producto?
Tú puedes contestarte a ti misma haciendo una selección de productos de los cuales no conozcas el autor e intentando adivinar si lo ha diseñado un hombre o una mujer. Si adivinas mas del 60% entonces significa que hay una regla.
Alicia: ¿Crees que existe una visión femenina a la hora de diseñar tanto de edificios como objetos? En caso afirmativo, ¿crees que tú aportas una visión femenina a la arquitectura?
En mi opinión existe una manera más o menos femenina de abordar las artes, pero muchas veces esto no se corresponde directamente con una mujer o un hombre. Hay muchos hombres que hacen una arquitectura muy femenina y muchas mujeres que hacen una arquitectura muy masculina. Gae Aulenti era una mujer que hacía cosas muy masculinas. Y Enric Miralles un hombre que introducía todo un mundo femenino de curvas. La arquitectura de hoy en día, la que hacen hombres y mujeres, me parece en general que es muy femenina en el sentido de cómo va lidiando con las situaciones. Dentro del estudio las mujeres tienen una manera de hacer las cosas algo diferente, pero es tan sutil que no puedes hacer una regla de ello.
Martín: ¿Crees que para ser un transgresor es necesario tener un profundo conocimiento de la Historia de la Arquitectura?
No sé si de la Historia de la Arquitectura, pero al menos el conocimiento de la época en la que vives. Porque si no sabes ni lo que existe ya, difícilmente puedes transgredir. Creo que nosotros no hemos sido transgresores. En el caso de Enric en particular, él era más que nada una persona que tenía ganas de proponer maneras diferentes de pensar.
Rodrigo: ¿Cuál es tu opinión sobre la experimentación e investigación proyectual, teniendo en cuenta la crisis económica, no tanto como un obstáculo, sino como una constricción para potenciar la creatividad y la imaginación?
Creo que la experimentación es algo que va más allá de la crisis. Si te dedicas a la experimentación siempre estás en crisis, porque no es un camino fácil. Y además es lo más caro que puedes hacer ya que implica que en vez de construir una maqueta sobre una idea, igual llegas a hacer 40. Con sus correspondientes 39 descartes…
Stefy: La mayoría de los proyectos de tu estudio se relacionan con el lugar en que surgen de una manera casi natural, convirtiéndose en un enriquecimiento del mismo. En los últimos años has empezado a trabajar en Asia, donde todo cambia rápidamente, donde los elementos naturales han sido nivelados por las excavadoras, los artefactos humanos han sido demolidos o lo serán en unos años… ¿Qué sugerirías a un arquitecto que se dispone a dibujar sobre una “pizarra blanca”?
Sobre una pizarra en blanco es muy difícil dibujar. No sé qué haría otro, pero yo me escaparía. De todas formas en blanco nunca hay nada. Siempre hay un contexto. Lo de trabajar en lugares diferentes es fantástico ya que realmente te conduce a descubrir cosas novedosas y otros puntos de vista. El otro día estaba con mis amigos intentando contar de manera divertida las cosas con que me encuentro trabajando en Asia. Me di cuenta de cómo este hecho te va cambiando poco a poco. Modifica también por supuesto tu concepto de la arquitectura o de lo que la arquitectura puede ofrecer, porque te encuentras con gente que tiene otras maneras de pensar. Esto para mí, como mínimo, es interesantísimo.
Pabellón de España para la Exposición Universal Shanghai 2010
Blanca: ¿Serías partidaria de la utilización de morteros de arcillas en los revestimientos interiores, para aportar mayor confort, mayor inercia térmica y transpirabilidad? En definitiva, ¿utilizas o utilizarías productos naturales de construcción que no afecten a la salud de sus moradores?
El mundo de los productos naturales y de los productos que velan por la salud me interesa muchísimo, aunque tengo que decir que me siento bastante ignorante al respecto. Pero tengo amigos arquitectos que se ocupan de bio-arquitectura y en la Fundación Enric Miralles estamos haciendo cursos sobre este tema porque creo que es maravilloso y debe ser algo para desarrollarlo más y más.
Guillermo: ¿Por qué crees que los edificios de viviendas han perdido la belleza de sus fachadas? Son todas iguales. Cubos más o menos conceptualmente minimalistas, ya no se usan cerámicas, vidrios… ¿No te parece que pierden originalidad?
No estoy segura de que sea así. Evidentemente estamos en una época dónde la decoración de una fachada no es precisamente la estética del momento. Hace unos centenares de años era muy importantes, ahora lo es mostrar la desnudez de un edificio. Es un estilo como otro cualquiera y no hay nada que diga que no sea algo que vaya a cambiar en un futuro.
Toni: La cubierta del Mercado de Santa Caterina es tan atractiva como poco visible. Y entiendo que de un coste elevado. En proyectos públicos los presupuestos deberían ser una de las prioridades (cosa que atañe a la administración, claro), invirtiendo en cuestiones de calidad de construcción más que en artificios. ¿Es posible que haya sido una equivocación plantear un elemento singular que sólo es observable desde el aire? ¿Sabes si el Ayuntamiento de Barcelona se ha planteado colocar un juego de espejos de gran tamaño para poder admirar la cubierta?
Tal y como planteas tu pregunta, parece que estés diciendo que el techo de Santa Caterina es invisible y la verdad es que no es así. Es el parque visual de todos los vecinos que viven alrededor del mercado, que antes tenían ahí una cubierta de asbestos. Además, en parte esta cubierta es como un punto de atracción hacia el propio mercado. Es una atracción muy singular. Si se viera más, sería demasiado. De todas formas me encantaría que también se planteara este juego de espejos o cámaras. Tengo que decirte además que hace tiempo presenté varias opciones para que fuera más visible, pero no sé muy bien por qué el Ayuntamiento de Barcelona todavía no ha conseguido llevar a cabo este proyecto. Creo que es algo que se tendría que hacer. Yo lo tengo aquí, en un cajón. Si tú tienes ganas de sacarlo e ir a proponérselo al Ayuntamiento, yo encantada.
Cubierta del Mercado de Santa Caterina de Barcelona.
Santurino: Teniendo en cuenta que las empresas de ingeniería y prefabricación van ganando terreno en el mundo de la construcción, con unos presupuestos imbatibles y apoyadas por un sistema en globalización, ¿Qué papel crees que le va a quedar a la arquitectura del lugar, pensado por y para el espacio en que se va a construir y a la utilización de materiales y técnicas constructivas mas tradicionales y locales?
No estoy de acuerdo en que el prefabricado sea un sistema de construcción de lo mas difundido y económico. Para nada. Es más bien al revés. Todavía hay que hacer mucho trabajo para que el sistema de prefabricados sea más accesible y abarate todavía más los precios. No es tan fácil como parece. Nosotros hemos probado a trabajar con sistemas prefabricados de ventanas justamente hace poco en unas viviendas que estamos terminando ahora en Barajas (Madrid) y no ha sido nada fácil. Yo creo que es un mundo que todavía tiene mucha carencia de creatividad.
Sebastian: ¿Cuál es la manera de abordar un concurso de arquitectura en cuanto a procesos?
Primero de todo tienes que seleccionarlo antes, no puedes aplicar a cualquiera. Después debes desarrollar una estrategia de grupo, invitando a personas a que colaboren contigo, dependiendo del concurso. Luego tienes que diseñarlo intentado entender lo que realmente se desea para poder ganarlo. Y si ganas, igual luego ni te lo encargan. O sea, que es un proceso muy difícil, pero es lo único que nos queda a los arquitectos…
Tomás: ¿Como abordáis en el estudio el choque entre la rigidez de la arquitectura en organización y funciones y la fluidez que aportáis a vuestras construcciones?
Tengo la impresión de que también tenemos una gran fluidez en la organización de nuestro estudio. La manera en que trabajamos se parece mucho al resultado formal de las cosas que hacemos.
Iñaki: Siendo aún estudiante de Arquitectura ¿existe la posibilidad de realizar prácticas en tu estudio?
Sí, tenemos muchos estudiantes en prácticas. Hay que venir al estudio a hacer una entrevista y explicar lo que se quiere. Nuestro despacho de arquitectura es casi como un taller, donde mucha gente está aprendiendo.
Miro: Tengo entendido que tienes muchos estudiantes en su estudio que trabajan de manera totalmente altruista sólo por el hecho de poder ponerlo en el curriculum. ¿Es eso cierto? ¿Que piensa de los despachos que no pagan a los becarios?
Esto es cierto y creo que con la experiencia del despacho profesional he aprendido que los becarios me aportan muchísimo. Sobre todo entusiasmo y la oportunidad de estar siempre con una generación muy joven. Pero también yo les doy mucho. Los arquitectos seniors se esfuerzan un montón en estar todo el rato enseñándoles. Se pierde mucho tiempo en introducir a estos jóvenes arquitectos. Esta mezcla entre profesionalidad y academia, que es un poco como funciona nuestro estudio, es algo muy bonito que me gustaría mantener. Hubo una época en que no teníamos becarios. Ahora somos prácticamente mitad y mitad. Me gustaría que los becarios realmente tuviesen una beca. Esto es algo que pedimos muchas veces… y muchas veces no es posible.
Michele: He acabado la carrera de Arquitectura y sé que tengo muchas cosas de aprender todavía. ¿Qué me recomendarías que hiciera ahora?
No lo sé realmente… pero una cosa que recomiendo siempre es ser muy abiertos, viajar, aprender a entender la mentalidad de los otros… por suerte estamos en un mundo que se está abriendo mucho. Poder viajar y tener acceso a poder entender a los demás es una de las pocas capacidades fundamentales que nos quedan.
Mari: Déjanos ser curiosos y cuéntanos cual es tu tienda de ropa y tu cafetería preferida de Barcelona. ¿Dónde te escapas cuando necesitas un respiro?
Hay una tienda maravillosa de ropa en Barcelona que se llama Jean Pierre Bua, pero tienes que ir poco porque sus vestidos de altísima calidad y a veces un poco caros. También me gusta una tienda muy simpática que se llama Notenóm. Y para ir a tomar un café, en el casco antiguo hay muchos cafés muy buenos. Me fascina Escribà, pero la verdad es que voy a cualquier café. A veces también voy al que está debajo del estudio, que es súper confortable.
Enric Miralles y Benedetta Tagliabue. Foto: Yoshio Futagawa.
Patricia: ¿Crees que habrías llegado donde has llegado si no te hubieses casado con Enric Miralles?
Seguramente no. Enric Miralles es fundamental en mi vida y en mi carrera, yo siempre lo digo y espero que se note mucho. Ahora he hecho una fundación en su nombre, porque quiero que quede muy claro lo importante que ha sido en la formación de nuestro estudio. Si no me hubiera encontrado con Enric Miralles, ¿qué me habría pasado? No lo sé… pero yo posiblemente andaba buscando alguien así y la atracción fue mutua. En la vida hay cosas que pasan por el destino; es imposible imaginar la vida de uno sin las cosas que te han pasado.
Bruno: Si hoy te encontraras contigo misma a los 25 años, ¿qué consejos te darías, tanto profesional como personalmente?
Suerte que no me encontraré conmigo misma a los 25 años porque no sabría qué decirme. En general, me he divertido mucho a lo largo de mi vida. Me gusta jugar a pensar que todo ha sido el destino y que la vida que he tenido era la que tenia que tener y punto.
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