Dentist with a View: Shift architecture urbanism transforma una casa histórica en un agradable consultorio.
Las cuatro nuevas consultas se sitúan en un nuevo volumen que se mimetiza y al tiempo contrasta con la casa existente. Se trata de una casa de forma arquetípica que imita la inclinación del tejado original, realizada en un material muy diferente: recubrimiento de cinc. La potencia visual de este diseño lo convierte en un «alien contextual», que enlaza con el ambiente rural de los alrededores mientras que crea un nuevo punto de referencia arquitectónico, y expresa su nueva función como edificio abierto al pueblo.
Este nuevo volumen proporciona a cada consulta un espacio semejante a una casita en miniatura. Los techos altos y la silla de dentista intimidan menos si se dispone de magníficas vistas al jardín, lo que consigue conectar interior y exterior y, por supuesto, permitir a pacientes y empleados desconectar y disfrutar de las plantas y el aire puro de los alrededores.
Las funciones secundarias de la consulta, más ocultas, se han situado en la casa antigua, sin dañar su estructura años 30. El paciente entra y espera en una atmósfera familiar que, junto a la experiencia del jardín abierto a la extensión, consigue tranquilizar una visita que en general pone a muchos los pelos de punta.